martes, 5 de noviembre de 2013

Limasa, sindicatos, huelgas .

Al igual que el cambio horario es inevitable, que, cada cierto tiempo, salga el tema de Limasa es un clásico también. En mi opinión, no deberíamos dejar de tener claras unas pocas cosas.

HUELGAS: Una huelga no es una fiesta. Le cuesta dinero a la empresa, le cuesta dinero al trabajador y se recurre a ella cuando no hay más remedio. Nadie quiere perder dinero por tocar las narices, al menos nadie en su sano juicio. Los trabajadores de Limasa planean una huelga para diciembre, concretamente, según lo que nos dicen desde los distintos medios de comunicación "para cuando más daño haga". Me parece lo más normal que quieran hacerla cuando más daño haga y más toque las narices a la empresa, no hay que ser un hábil estratega para darse cuenta que cuanto más molestes a la empresa, más inclinada se sentirá a negociar. Podrían intentar hacerla a la japonesa, eso de trabajar el doble, pero con una Málaga impecable me da que no sólo no iban a negociar con ellos, sino que además tendríamos letreritos de #MálagaFunciona hasta en el carnet de identidad.

LIMASA: Antes de que se nos olvide, cuando por convenio un puesto es hereditario o hay otros derechos increíbles concedidos, no es porque una mañana de abril brotara de una maceta el convenio colectivo de esa empresa. Detrás hay años de dirección incapaz que, en época de bonanza, concedió alegremente cosas que ahora les provocan dolores de cabeza. Que ahora aparezca el concejal de turno en un medio diciendo que todos tienen que apretarse el cinturón y bla bla blá y no haga ni un poquito de autocrítica de la gestión municipal de años anteriores es tratar a los ciudadanos de idiotas. Y ya cuela menos.

SINDICATOS: Y ya que estamos con temas laborales, hay que ser muy simple para decir que no te sientes representado por los sindicatos. Un grupo de trabajadores que se unen para defender los derechos de sus compañeros es un sindicato. Que no te sientas representado por UGT o CCOO o cualquiera de los actuales es distinto. Pensar que sin los trabajadores agrupados, me da igual en qué siglas, las empresas iban a mirar por los suyos sacrificando si fuera necesario parte de sus beneficios es suicida. A no ser que alguien se sienta más cerca de la empresa que del trabajador, entonces entiendo perfectamente que se lance esta pregunta, se desprestigie a todos los sindicatos y a todos los sindicalistas y se pretenda un nuevo orden en el que jefes buenísimos mirarán, como padres preocupados, por el bienestar de sus hijos/trabajadores.

Por supuesto es mi opinión, también es posible que tú pienses que los sindicatos, todos, sobran, que el único problema de Limasa son sus trabajadores y sus prebendas y que las huelgas hay que hacerlas cuando menos molesten a personal, no pasa nada, hay gente que pensaba que el beta iba a ser el sistema de video que iba a triunfar.