lunes, 14 de septiembre de 2015

El Tostón


Pese a lo que pueda parecer, el empate a cero goles entre el Málaga y el Eibar deja muchas lecturas interesantes. Les resumo algunas de ellas.

Minuto quince, primer tiempo. Podían poner los asientos más cómodos, no digo yo que pongan sillones pero algo más cómodos, los riñones los tengo enganchados a la nuca ¿qué le protestan al cuarto árbitro, que nadie está jugando?

Minuto treinta, primer tiempo. Lo de las pipas sin sal es algo para reflexionar, porque sal tienen y un montón, luego te inflas de agua y no hay narices de ir al servicio no vaya a ser que a algún futbolista se le ocurra hacer algo y te lo pierdas. Y en el descanso es imposible, la próxima vez igual traigo patatas fritas.

Minuto cuarenta y tantos, primer tiempo. A medio metro, Charles la ha fallado a medio metro. Ya, el portero la ha parado pero es que estaba a medio metro, vale, igual metro y medio, no, no quiero más pipas, déjame ya de pipas.

Minuto doce, segundo tiempo. ¿Cada cuánto hay que cambiar la correa de distribución del coche? Creo que son cada ciento cincuenta mil kilómetros y el coche tiene ya doscientos mil, pero vale una pasta, igual aguanta hasta la extra de Navidad. Mira, casi han tirado a puerta.

Minuto treinta, segundo tiempo. Yo creo que hay vida inteligente en otros planetas, es estadística pura. Hay miles y miles de sistemas solares similares al nuestro y sería absurdo pensar que sólo a este planeta le ha tocado la lotería de la vida. Tengo la boca seca, a ver si eran pipas con sal.

Minuto cuarenta y tantos, segundo tiempo. Al árbitro habrá que felicitarlo porque el penalti que le ha birlado al Eibar es de los claros. Creo que he pillado algo de peso este verano, tengo que coger más la bici. Mira, ya ha terminado.

Mucha gente piensa que un empate a nada en un partido sin sustancia es un tostón insoportable, pero hora y media de nada te permite vivir experiencias introspectivas que una goleada haría imposible de disfrutar.

@jjblanesmalaga